21 de septiembre, Día Mundial del Alzhéimer
Esta celebración fue instituida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y es auspiciado por Alzheimer's Disease Internacional (ADI), desde 1994.
Todos los actos que se organizan para este día tiene un doble objetivo; por un lado, sensibilizar a la sociedad acerca de esta "epidemia del siglo XXI", así como sus consecuencias sociosanitarias; y por otro, desarrollar una campaña de educación sanitaria dirigida a promover la prevención de esta enfermedad que afecta a más 150 000 personas, que la padecen directamente en Cuba, y a sus familiares cuidadores.
El "Informe Mundial 2013 sobre la Enfermedad de Alzheimer" (World Alzheimer Report 2013 Journey of Caring. AN ANALYSIS OF LONG-TERM CARE FOR DEMENTIA) revela que esta epidemia global origina un déficit de cuidadores y que falta apoyo para los familiares de estos pacientes.
El número de adultos mayores dependientes se incrementaría a 277 millones para el año 2050 y la mitad padecería de la enfermedad de Alzheimer o de otro tipo de demencia.
El Informe Mundial sobre la Enfermedad de Alzheimer dado a conocer por la Asociación Internacional de Alzheimer (ADI) examina las últimas tendencias regionales y mundiales que se observan en los adultos mayores necesitados de atención por su demencia, y a la vez proporciona un análisis de los sistemas de atención a largo plazo en todo el mundo.
El informe indica que en la medida en que la población envejece, el sistema tradicional de cuidado ?informal? brindado por familiares, amigos y por la comunidad ya no será sostenible. Los datos del informe 2013 pronostican un aumento del número de adultos mayores dependientes de 101 millones en 2010 a 277 millones en 2050, casi el triple. De esta cifra, casi la mitad padecería de la enfermedad de Alzheimer o de otro tipo de demencia, por lo que se convertiría en una crisis de salud global.
En Cuba, se estiman en aproximadamente 150 000 las personas que padecen enfermedad de Alzheimer u otra causa de demencia y este número se incrementará exponencialmente hasta alcanzar la cifra de 273 000 personas en el 2030, y 421 000 en el 2050. En nuestro país, la demencia es la primera causa de discapacidad en adultos mayores, y es la mayor contribuyente de dependencia, necesidades de cuidado, sobrecarga económica y estrés psicológico en el cuidador.
Los costos económicos de las demencias, se estimaron en 604 billones de dólares anuales a escala mundial en el 2010, produciéndose los mayores costos en Norteamérica y Europa. En Cuba, en los próximos 30 años los costos de las demencias se incrementaran en tres veces la cifra actual estimada de 512 millones de dólares anuales.
El informe global ofrece un panorama abarcador de la repercusión de esta enfermedad en la sociedad. El énfasis particular de este año estuvo en el impacto del Alzheimer y de otras demencias en los cuidadores. Las conclusiones del informe reflejan la necesidad de un apoyo adicional con el objetivo de aliviar la carga sobre el individuo y sobre la infraestructura a escala mundial.
El profesor Martin Prince, autor principal del informe, comenta lo siguiente: ?Las personas dementes necesitan un cuidado especial. En comparación con otros pacientes que reciben atención a largo plazo, este tipo de enfermos necesita mayor cuidado personal, más horas dedicadas a ellos y mayor supervisión, todo lo cual se asocia a un mayor esfuerzo por parte del cuidador y a mayores gastos. Sus necesidades de atención surgen en la fase temprana de la enfermedad y evolucionan constantemente con el transcurso del tiempo, y por ende requieren planificación, monitoreo y coordinación por anticipado. De ahí que la demencia tiene que convertirse en una prioridad de la salud pública y es preciso realizar una adecuada planificación para que las personas con demencia tengan mejor calidad de vida.
La Asociación Internacional de Demencia insta a todos los gobiernos a hacer de la demencia una prioridad mediante el desarrollo de planes nacionales de enfrentamiento y tratamiento de la enfermedad, a fin de garantizar que se estructuren y se financien sistemas nacionales de atención social y sanitaria de forma apropiada y se brinde atención a largo plazo y de elevada calidad a los pacientes a lo largo de su permanencia en el mundo de la demencia.
Marc Wortmann, director ejecutivo de la ADI expresó: ?Tenemos que valorar a todos los que brindan atención directa a los enfermos dementes. Esto incluye tanto a cuidadores que reciben remuneración como a los familiares cuidadores voluntarios, puesto que comparten mucho en común. Los gobiernos deben reconocer el papel de los cuidadores y garantizar el establecimiento de políticas que los apoyen?.
El informe expresa que las actuales inversiones en el campo del desarrollo de programas y las investigaciones sobre esta enfermedad (incluidos prevención, tratamiento, curación y atención) se encuentran por debajo de lo que se consideraría indicado, debido a la implicación y al costo de este trastorno. Se hace un llamado a los gobiernos y a las organizaciones que aportan recursos para la investigación en el mundo a transformar su sistema de prioridades y a garantizar el incremento, al menos en diez veces, de los actuales niveles de inversión de recursos.
Para mayor información acerca de la demencia en Cuba le invitamos a visitar el sitio Alzheimer Cuba.