El estudio sobre la calidad sanitaria de las aguas de playa de Costa Rica, elaborado por el Laboratorio Nacional de Aguas del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados, indica que 96 de 100 playas participantes en el programa del año 2011, pasaron la rigurosa prueba de calidad de sus aguas. Se encontraron pocos coliformes fecales (restos de heces) en los sitios analizados y por ello, la calidad de su agua estuvo en el rango de “excelente” a “buena”. Sin embargo, es importante cuidad la contaminación en las desembocaduras de ríos y esteros.  Las playas insalubres para la natación según el estudio son Tárcoles y Azul ubicadas en la provincia de Puntarenas y en Limón están Portete y Los Baños. Destaca que en esos cuatro lugares desembocan los ríos que presentan los rangos más altos de coliformes fecales, como el río Tárcoles y el río Portete, que llegan a las playas del mismo nombre, respectivamente. Para revertir esta situación se requiere reforzar las acciones sanitarias para el manejo de las aguas residuales y evitar la contaminación de los ríos y playas.

La evaluación periódica de la calidad del agua de las playas permite diagnósticos sanitarios y proteger la salud de los visitantes a las zonas costeras y además, como incentivo para el cuidado de las playas. La comunidad que logra satisfacer los aspectos de calidad del agua de mar, calidad de las playas, acceso a agua potable, tratamiento de las aguas residuales, educación ambiental, seguridad y administración adecuada reciben la "Bandera Azul Ecológica".

El proyecto "Bandera Azul Ecológica" se estableció como un incentivo a los hoteleros, cámaras de turismo y comunidades costeras para proteger en forma integral, las playas de Costa Rica. Dicho incentivo es una adaptación de la campaña "Bandera Azul" que otorga la Unión Europea desde 1985.

Costa Rica tiene playas con mucha belleza natural y atracción turística nacional e internacional. Lamentablemente, no existe armonía entre el desarrollo de las poblaciones costeras y el auge hotelero, respecto a la protección del medio ambiente de las playas.

La campaña de Bandera Azul es una iniciativa conjunta del Instituto Costarricense de Turismo (ICT), Ministerio de Medio Ambiente (MINAE), Servicio Nacional del Agua, Ministerio de Salud Pública, Cámara Nacional de Turismo (CANATUR) y miembros de la comunidad se esfuerzan para lograr la Bandera Azul.

Las playas son evaluadas sobre un criterio estricto de la calidad del agua del océano y el agua potable, la eliminación de residuos, instalaciones sanitarias, señalización, seguridad turística, educación ambiental y la participación de la comunidad en el mantenimiento de la playa. Sólo las playas con una puntuación de 90% de éxito son acreedoras de una distinción y la recepción de la Bandera Azul.

La mayoría de los costarricenses residentes en las comunidades costeras depende económicamente de sus playas. La campaña Bandera Azul del Programa de Ecología permite que los turistas y las comunidades locales disfruten de los beneficios que ofrecen las playas, sin temor a la contaminación, por ello las comunidades, los empresarios del turismo local y las municipalidades costeras apoyan los programas dirigidos al cuidado de las playas.