Holguín mantiene uno de los más bajos índices de infestación del Aedes aegypti y ocupa un lugar destacado en el país en la lucha contra el dañino insecto, según confirmaciones recientes de la doctora Ileana Morales Alemán, jefa nacional del Departamento de Control y Supervisión del vector.

Foto del autorLa disciplina y la organización desplazaron los formalismos durante las inspecciones diarias que preceden las salidas al terreno.

Asimismo, aseveró que el trabajo sistemático e integral ha sido el arma principal para frenar los focos y criaderos del trasmisor del dengue y de la fiebre amarilla, concepto aún sin consolidar en muchos sitios.

Tras el intercambio con la especialista, Granma retomó el asunto con el director de Vigilancia y Lucha contra Vectores en la provincia de Holguín, Oney Peña Baldoquín, quien aclaró que aquí la situación medioambiental no es diferente a la de los territorios colindantes.

DISCIPLINA, VIGILANCIA Y RESPUESTAS RÁPIDAS

"La posición lograda, señaló Peña, se debe a la disciplina con que hemos cumplido los requisitos técnicos y metodológicos del Programa Nacional de Erradicación del Aedes aegypti, que exige la participación de todos los factores de la sociedad.

"Un ejemplo concreto de la unidad lograda son los análisis técnicos del enfrentamiento al insecto, realizados durante las plenarias de cierre de ciclo, a las que asisten el personal de lucha contra vectores, los directivos de Salud Ambiental, Higiene y Epidemiología y Promoción para la Salud, los presidentes de consejos populares y delegados de circunscripciones, así como los representantes de Comunales, Acueducto u otros organismos, según la incidencia en el asunto a evaluar".

El enfoque colectivo permite la estratificación de las zonas de riesgo: o sea, determinar las más vulnerables a la aparición de focos en el interior del territorio y en los límites con otras provincias.

"Con el propósito de no bajar la guardia estimulamos el uso de las larvitrampas en los barrios. Hoy mostramos una por cada 13,9 viviendas o locales, con lo que superamos la indicación nacional de llegar a una por 40.

"Entre las experiencias puestas en práctica, está el control biológico mediante peces que se alimentan de larvas. Los introducimos en grandes depósitos de agua y sustituimos el empleo de abate, comprado en el exterior. Los peces los obtenemos a muy bajo precio en bancos sanitariamente certificados.

"La vigilancia es nula si no hay capacidad de respuesta. Cuando detectamos un foco, en el acto organizamos las radiobatidas. En esos casos no descuidamos el ciclo de trabajo que va desde las encuestas entomológicas para determinar la presencia del vector en todas sus fases, hasta los tratamientos para erradicar el mosquito adulto. Los primeros que nos mudamos para el terreno somos los directivos, solo así se le puede tomar el pulso a las acciones".

ORDEN Y CAPACITACIÓN

"Hemos logrado que los integrantes de las brigadas aprecien la importancia de las revistas previas a la salidas diarias hacia el terreno. Son momentos en los que comprobamos la asistencia y el estado de los medios de trabajo, distribuimos las tareas y evaluamos deficiencias de jornadas anteriores".

Otro pilar, comentó, es la captación de la fuerza de trabajo sobre la base de la idoneidad.

"También ponemos mucho interés en la capacitación, motivo por el cual formamos más de 360 técnicos y licenciados en Higiene y Epidemiología y cerca de 30 biólogos. En septiembre próximo comenzará la formación de 253 obreros calificados y técnicos de nivel medio en Control de Vectores.

"Nuestros operarios tienen el reto de transformarse en verdaderos gestores de Salud y modificar la mentalidad de aquellas personas que aún no participan dinámicamente en la lucha contra vectores, porque creen que es asunto exclusivo de nuestras fuerzas, resultado de tanta protección ofrecida por el sistema de Salud Pública.

"Y algo que no se puede olvidar: debe parecer poco lo que se haga en materia de fiscalización y control de la calidad del trabajo de enfrentamiento. Si esta parte es débil, lo demás se viene abajo".

GERMÁN VELOZ PLACENCIA

Periodico Granma