El 51º Consejo Directivo aprobó esta tarde la Estrategia y Plan de Acción para eSalud, que busca mejorar el acceso a los servicios de salud y su calidad, a través del uso de tecnologías de la información y comunicación. Entre otras cosas, procura que, al aplicar estas tecnologías a la salud, mejore la eficiencia en el uso del tiempo y de los recursos, y aumenten los insumos para tomar decisiones complejas, por ejemplo, sobre el tratamiento de un paciente.

La Directora de la Organización Panamericana de la Salud, doctora Mirta Roses, reforzó el rol de esta estrategia para consolidar las iniciativas regionales, de manera de evitar la duplicación de esfuerzos y de asegurar la optimización de recursos humanos y financieros. Se refirió específicamente a la integración para el desarrollo de la estrategia de instituciones como la CEPAL, SELA y la Organización de Estados Americanos (OEA).

Por su parte, el Gerente del Área de Gestión del Conocimiento y Comunicaciones de la OPS, Marcelo D’Agostino, destacó la necesidad de asimilar que se requieren de leyes, normas y estándares para el intercambio de informaciones a nivel nacional e internacional, es decir, para asegurar la inteoperabilidad. También sostuvo que se debe trabajar en la “adaptabilidad” para que las personas acepten este nuevo esquema de relacionamiento médico-paciente. “Es importante trabajar junto a los organismos e instituciones responsables de la infraestructura tecnológico para asegurar la accesibilidad”, afirmó D’Agostino.

Las delegaciones de 18 países manifestaron su respaldo a la estrategia y explicaron el estado de situación de la región.

Algunos de los componentes de la eSalud son: el registro médico electrónico (o historia clínica electrónica; la telesalud, que consiste en la prestación de servicios de salud a través de tecnologías de la información en particular a distancia; mSalud, que implica la utilización de dispositivos móviles, como teléfonos celulares y otros dispositivos inalámbricos para monitorear pacientes, para el cuidado de la salud; el eLearning, que permite recibir educación a distancia por estas tecnologías; la educación continua en tecnologías de la información y comunicación para profesionales de la salud; y la interoperabilidad y estandarización, que implica que todas las tecnologías en esta área sean compatibles y que sigan las mismas normas en materia de eSalud.